El 3 de marzo del 2000, Charly García protagonizó una de las anécdotas más recordadas de su carrera al lanzarse desde el noveno piso del Hotel Aconcagua, en Mendoza, Argentina directo a la piscina.
Ahora, 25 años después, un grupo de artistas visuales decidió inmortalizar ese momento con una escultura de tamaño real, construida con más de 20 mil blíster de pastillas.
Un homenaje a Charly García con conciencia ambiental
El proyecto fue desarrollado por LaMarEnCoche, un colectivo de artistas visuales que ya había trabajado con materiales reciclados en el pasado.
Su nueva obra, titulada Clavadismo, mide 1,94 metros y captura la postura exacta en la que el músico cayó al agua.
"La elección de este material nos hace reflexionar sobre el consumo excesivo de medicamentos, la automedicación y la dependencia a estos fármacos", explicaron a TN los creadores de la escultura.
Para recolectar los blíster, contaron con el apoyo de la Secretaría de Medio Ambiente y la Secretaría de Salud de Almirante Brown. Estos habilitaron centros de acopio en diferentes puntos de la ciudad.
La estructura está hecha de caños PVC y cartón, cubierta con papel y recubierta con los blíster reciclados. "Tuvimos que limpiarlos, desabollarlos, pintarlos y pegarlos uno por uno", detallaron los artistas, quienes trabajaron durante seis meses en la obra.
El camino de LaMarEnCoche hasta Clavadismo
El colectivo de artistas visuales nació en 2021, cuando sus integrantes coincidieron en una diplomatura en Artes Visuales en el Instituto de Cultura de Almirante Brown.
Desde entonces, han desarrollado proyectos que combinan arte y reciclaje. Como Blíster devoradores, un cerdito con galera hecho con 2.400 blíster, y Charly 2D, una obra con la imagen del músico en blanco y negro.
El desafío de Clavadismo surgió casi como una broma en un almuerzo entre los miembros del grupo, pero pronto se convirtió en una misión artística.
"Somos todos fanáticos de Charly y nos propusimos hacer su inolvidable caída en Mendoza a escala real", contaron.
La escultura ya tiene su primera exhibición en el Museo Sempere de Burzaco, donde cuelga en altura para simular el salto del artista. Ahora, los creadores sueñan con que la obra llegue a Charly García y que el propio músico la vea en persona.