Efemerides

El inicio de "Definitely Maybe": Oasis entra al estudio y marca la historia del britpop

El 7 de enero de 1994, Oasis inició las grabaciones de su álbum debut, "Definitely Maybe", considerado una piedra angular del britpop.

Oasis

Un día como hoy, en 1994, Oasis inició las grabaciones de su álbum debut, Definitely Maybe, en un estudio del sur de Gales.

Este disco no solo marcó el comienzo de una de las bandas más influyentes del britpop, sino que también se convirtió en un ícono cultural que redefinió la escena musical de los años 90.

Publicado el 29 de agosto de 1994 por Creation Records, el álbum incluye clásicos como Supersonic y Live Forever.

En sus primeros cuatro días, Definitely Maybe vendió 100.000 copias y debutó en el primer lugar de las listas británicas.

Esto lo convirtió en el álbum debut más vendido en la historia del Reino Unido hasta ese momento. En total, ha vendido alrededor de 15 millones de copias a escala mundial.

El nacimiento de un fenómeno cultural

Reuniendo influencias de The Beatles y The Rolling Stones, el sonido de Oasis fue clave en la popularización del britpop, junto con el Parklife de Blur.

El éxito del disco ayudó a situar a esta nueva ola de rock británico en la cima de las listas y a consolidar a Oasis como uno de los referentes de la década.

"Definitely Maybe es lo que el mundo estaba esperando", escribió el crítico Paul Lester en Melody Maker, destacando el optimismo y la fuerza del álbum en una era dominada por el grunge estadounidense.

Sin embargo, el proceso de grabación no estuvo exento de desafíos. Las primeras sesiones con el productor Dave Batchelor resultaron insatisfactorias, lo que obligó a la banda a buscar nuevas alternativas.

Finalmente, el ingeniero y productor Owen Morris logró capturar la energía en vivo de la banda, creando una mezcla explosiva que aún hoy resuena como una declaración de intenciones.

Reconocimientos de Definitely Maybe

El impacto de Definitely Maybe se extendió más allá de las listas de éxitos. En 2008, una encuesta de Q Magazine lo coronó como el mejor álbum británico de todos los tiempos, mientras que su sucesor, (What’s the Story) Morning Glory?, ocupó el segundo lugar.

Además, el álbum fue reconocido por su capacidad para revitalizar el rock británico y conectar con una generación en busca de nuevos héroes musicales.

La portada del disco también se convirtió en una imagen icónica, tomada en la casa del guitarrista Bonehead y cargada de referencias personales y culturales.

Desde una foto del futbolista George Best hasta un cartel de Burt Bacharach, cada detalle reflejó el carácter irreverente y ambicioso de la banda.


Contenido patrocinado

Compartir