La actriz Mariana Derderián compartió una emotiva reflexión en sus redes sociales a seis meses de la trágica muerte de su hijo Pedro, de seis años, a causa de un incendio en su hogar. A través de un video en su cuenta de Instagram, Mariana sorprendió a sus seguidores con una profunda reflexión sobre el dolor, la vida y la muerte.
En su mensaje, la actriz expresó que, aunque nunca imaginó enfrentar una tragedia tan devastadora, agradece el tiempo que tuvo con él. "Yo quiero compartir con ustedes algo, y es que si a mí me hubieran dicho Mariana, elige, o tienes un hijo durante seis años, y este va a ser el desenlace, o no lo tienes nunca, yo hubiera elegido: 'sí, lo quiero tener'"
Mariana señaló que, a pesar del sufrimiento, prefiere centrarse en los seis años maravillosos que vivió con Pedro, en lugar de lamentarse por lo que pudo haber sido. "Prefiero agradecer por lo que sí tuve, por esos seis años maravillosos que sí existieron, en vez de lamentarme por lo que no fue", añadió con una emoción palpable.
"Tengo que ser feliz"
Reconociendo el dolor que la acompaña, Mariana Derderián explicó que, aunque sentirá tristeza siempre, también se siente con la responsabilidad de ser feliz para honrar la memoria de su hijo. "He tenido mucha pena, por supuesto, y voy a tener siempre, yo no creo que yo me vaya a morir sin pena, pero dos cosas: tengo que ser feliz porque lo voy a honrar y porque se lo debo a mi hija y a mi familia que sí quedó, y también me lo debo a mí y tengo que hacer que esto valga la pena", expresó.
Aseguró que tiene la intención de transformar todo ese sufrimiento en algo positivo, en algo que tenga valor, para que el dolor se convierta en una lección de vida. "Tengo ganas de hablar de la muerte, pero desde un lugar muy lindo, desde un lugar luminoso. Quiero darle luz, porque la sociedad donde nacemos es muy responsable de cómo nosotros vivimos la muerte, y finalmente, si uno empieza a ver otras culturas, otros países, otras religiones, cómo enfrentan estos momentos de su vida, hay distintas sabidurías".
"Entonces démosle esa luz, porque cuando tenés una relación con la muerte, mejora la vida, estás más consciente del aquí, del presente, del ahora, del gozarla. Esas cosas chicas por las que nos aproblemamos, desaparecen, y todo te empieza a importar nada, y solamente cachas lo importante, y lo importante son dos cosas, la salud, y los afectos, y no hay nada más importante", sentenció.