Un nuevo Starbucks ha captado la atención por ofrecer más que café: una oportunidad para mirar de cerca uno de los lugares más enigmáticos del mundo.
Situado en una torre de observación, este establecimiento permite a sus clientes disfrutar de sus bebidas mientras contemplan un territorio que suele permanecer fuera del alcance de las miradas extranjeras.
El café, con capacidad para 30 personas, está ubicado en el Ecoparque de la Paz Aegibong, un lugar cargado de historia y significado.
Durante su primer día de operaciones, atrajo tanto a curiosos como a locales, quienes aprovecharon la vista desde el mirador exterior o disfrutaron de su café en el acogedor interior.
Corea del Norte y Corea del Sur: entre historia y tensiones
La cafetería se encuentra en Corea del Sur, a unos 32 kilómetros de Seúl, cerca de la Zona Desmilitarizada (DMZ) que divide al país con Corea del Norte.
Desde el mirador, los clientes pueden observar, en días despejados, granjas, edificios de baja altura e incluso personas caminando en el condado de Kaepung, al otro lado de la frontera.
"Me gustaría poder compartir este sabroso café con la gente que vive justo enfrente de nosotros", comentó Baek Hea-soon, un visitante local.
Para Lim Jong-chul, un cliente de 80 años, el lugar tiene un efecto particular: "El concepto de seguridad aquí siempre me pareció rígido y tenso, pero ahora, con este café, me parece más tranquilo y reconfortante", recoge CNN.
El sitio, originalmente conocido como la Colina 154, fue escenario de intensos combates durante la Guerra de Corea (1950-1953). Aunque los enfrentamientos cesaron tras un armisticio, las dos Coreas nunca firmaron un tratado de paz, lo que mantiene la tensión en la región.
Turismo y una vista al hermetismo
Este Starbucks es una de las pocas maneras que tienen tanto turistas como locales de obtener un vistazo, aunque sea lejano, al territorio norcoreano.
La cafetería complementa las visitas tradicionales a la DMZ, un destino turístico popular por su importancia histórica y simbólica.
La inauguración del café coincide con un contexto de tensiones entre ambas partes.
En los últimos meses, declaraciones y amenazas han agudizado las relaciones. En octubre, el líder norcoreano advirtió sobre el uso de armas nucleares si era atacado, lo que generó preocupación en la región.
A pesar de ello, la apertura del café de Starbucks busca ofrecer un espacio de reflexión, donde historia, cultura y curiosidad se entrelazan. Como señaló el alcalde de Gimpo, donde se encuentra el parque, este lugar es "único" y refleja el "encanto de la cultura coreana".
Para quienes se preguntan cómo es vivir en uno de los países más aislados del mundo, esta cafetería ofrece, aunque sea simbólicamente, una ventana hacia esa realidad.