El 29 de noviembre de 1989, Lou Reed y John Cale se reunieron en la Brooklyn Academy of Music para interpretar Songs for Drella, un tributo a su amigo y mentor Andy Warhol.
Este proyecto, que luego sería lanzado como álbum en 1990, marcó el primer trabajo conjunto de los exmiembros de The Velvet Underground desde 1972 y reflejó la influencia profunda de Warhol en sus vidas y carreras.
El título, Drella, combina los términos "Drácula" y "Cenicienta" (en inglés, Cinderella) y fue un apodo creado por Ondine, una de las "superestrellas" de Warhol.
Las canciones del álbum presentan una narrativa en tres perspectivas: los pensamientos ficticios de Warhol en primera persona, relatos en tercera persona de eventos en su vida y reflexiones personales de Reed y Cale sobre su relación con el artista.
"Es un retrato íntimo de Warhol", explicó Reed en su momento. "Queríamos capturar su complejidad, su humor y también las tensiones que vivíamos con él".
El concierto que marcó el inicio del proyecto
La primera versión completa de Songs for Drella se presentó en el Next Wave Festival, celebrado entre noviembre y diciembre de 1989 en la Brooklyn Academy of Music.
Durante la última presentación, Reed y Cale sorprendieron al público interpretando Pale Blue Eyes junto a Maureen Tucker, en lo que fue un guiño al pasado de The Velvet Underground.
Un año después, Sire Records lanzó el álbum y su presentación en Brooklyn quedó inmortalizada en una filmación dirigida por Ed Lachman. Aunque el trabajo se concibió como un todo indivisible, se lanzó el sencillo Nobody But You.
A pesar del éxito de Songs for Drella, las diferencias personales entre Reed y Cale llevaron a este último a decidir no colaborar más con Reed.
Sin embargo, el proyecto sirvió como un puente para la reunión de The Velvet Underground en 1993, un evento esperado por años por los fanáticos de la banda.
Andy Warhol, la inspiración y el núcleo del álbum
El álbum conceptual no solo rinde homenaje a Warhol como artista, sino también como una figura central en la vida de Reed y Cale. Canciones como Style It Takes y Open House ofrecen una visión poética de su visión del arte y su capacidad para transformar la escena cultural de Nueva York.
"Warhol siempre estaba un paso adelante", recordó Cale. "Este álbum no es solo para recordar a Andy, sino para entender su impacto".