La icónica actriz Gena Rowlands, conocida por sus inolvidables actuaciones en películas como Una mujer bajo la influencia (A Woman Under the Influence) y Diario de una pasión (The Notebook), falleció el miércoles a los 94 años en su hogar en Indian Wells, California.
Su partida fue confirmada por la oficina del agente de su hijo, el director Nick Cassavetes, a través del diario Variety.
Por ahora, no se han revelado las causas de su muerte.
Rowlands fue una figura central en el cine estadounidense durante más de seis décadas.
Gena Rowlands | Getty Images
Una carrera marcada por el talento y la colaboración
Rowlands se destacó por su estrecha colaboración con su difunto esposo, el actor y director John Cassavetes. Juntos realizaron 10 películas, entre las que se encuentran las nominadas al Oscar A Woman Under the Influence (1974) y Gloria (1980).
Estas obras no solo destacaron por la brillante dirección de Cassavetes, sino por la intensa y realista interpretación de Rowlands, quien se convirtió en una de las actrices más respetadas de su generación.
A lo largo de su carrera, Gena Rowlands fue reconocida con cuatro premios Emmy y dos Globos de Oro, consolidando su estatus como una de las grandes del cine y la televisión.
Gena Rowlands en Gloria | Getty Images
Gena Rowlands: un adiós marcado por el recuerdo
Nick Cassavetes, quien dirigió a su madre en The Notebook (2004), había revelado en junio que Rowlands padecía alzhéimer, según recoge Variety.
En esa película, Gena interpretó a Allie, la versión mayor del personaje de Rachel McAdams, que también lucha con esta enfermedad.
El papel de Allie en The Notebook no solo fue un reflejo de su propio desafío personal, sino también un tributo a su madre, Lady Rowlands, quien también padeció alzhéimer.
La última aparición cinematográfica de Rowlands fue en Six Dance Lessons in Six Weeks (2014). Allí compartió pantalla con Cheyenne Jackson, poniendo fin a una carrera extraordinaria con una interpretación llena de gracia y profundidad.
A Gena Rowlands se le recordará no solo por su inigualable talento, sino también por su capacidad para capturar la esencia de la condición humana en cada uno de sus personajes.