El fallecimiento del querido actor de Friends, Matthew Perry, ha sido bastante comentado durante las últimas semanas. Las investigaciones revelaron que el equipo de Perry estuvo involucrado en su muerte, lo que ha generado gran impacto. Sin embargo, ahora salieron a la luz las que serían las últimas palabras del intérprete.
El actor fue encontrado muerto en su casa de Los Ángeles el 28 de octubre, a la edad de 54 años. Un informe de la autopsia determinó que su muerte fue accidental. Además, se demostró que falleció por los efectos agudos de la ketamina que lo llevaron a ahogarse en su jacuzzi.
La semana pasada las autoridades federales estadounidenses realizaron una conferencia de prensa en Los Ángeles. En el lugar establecieron que habían arrestado y acusado a cinco personas en relación con la muerte de Perry.
Las autoridades descubrieron una "amplia red criminal" de proveedores de ketamina que "se aprovechaban" de los problemas de adicción de Perry.
Uno de los arrestados es Kenneth Iwamasa, asistente personal de Perry. Los documentos especifican que el día de su muerte, el actor le pidió a Iwamasa que le administrara ketamina varias veces. De hecho, el actor acostumbraba inyectarse entre 6 y 8 veces al día.
Las últimas palabras de Matthew Perry
Según lo informado por NBC News, las últimas palabras de Perry fueron a Iwamasa. El actor le habría pedido que "le diera con uno grande" (refiriéndose a una alta dosis de ketamina), apenas unas horas antes de que lo encontraran inconsciente en su jacuzzi.
Los documentos afirman que Perry le pidió a Iwamasa la primera dosis a las 8:30 am del 28 de octubre, y la segunda cuatro horas después. Luego le pidió a Iwamasa una tercera dosis y que prepararan su jacuzzi. Posteriormente se dice que Iwamasa salió de la casa, solo para regresar más tarde y encontrar a Perry muerto.
Aparte de Iwamasa, las personas acusadas por el Departamento de Justicia son Jasveen Sangha, también conocida como la "Reina de la Ketamina", el Dr. Mark Chávez y el Dr. Salvador Plasencia, y otro individuo, Erik Fleming.
Por ahora solo tres personas se han declarado culpables. A Fleming se le adjudicó un cargo de conspiración para distribuir ketamina y un cargo de distribución de ketamina con resultado de muerte, admitiendo en documentos judiciales que distribuyó la ketamina que mató a Perry. También aclaró que obtuvo la droga de Sangha y distribuyó 50 viales a Iwamasa, la mitad de ellos cuatro días antes de la muerte de Perry.
Iwamasa se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina causando la muerte y admitió haber inyectado repetidamente a Perry la droga sin el entrenamiento adecuado.
Finalmente, Chávez se declaró culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina. Sumado a esto, admitió haber aceptado vender la droga a Plasencia.