El actor que protagoniza Footloose hizo una particular revelación recientemente. Kevin Bacon aseguró que, luego de 40 años desde que saltó al estrellato, prefiere ser reconocido a ser invisible mientras camina por la calle.
En específico, el actor realizó un experimento: se acercó a un maquillista para que modificara todos los aspectos más identificables de su físico y salió a caminar. Pero cuando lo hizo, no le gustó lo que experimentó.
El experimento de Bacon
Por medio de una reciente entrevista, Bacon aseguró que desde hace mucho tiempo anhelaba el anonimato del hombre común. "No me quejo pero tengo una cara que es bastante reconocible. Ponerme el sombrero y las gafas sólo funcionará hasta cierto punto", dijo.
Por esta razón decidió acercarse a un maquillador de efectos especiales y le pidió que le hiciera un disfraz prostético. Así, el actor ocupó una serie de elementos que hizo que fuera irreconocible. Utilizó una dentadura postiza, nariz diferente y anteojos.
Probó todo este nuevo atuendo en un centro comercial de Los Ángeles. Esto le terminó por dar en el cometido, ya que para su deleite, descubrió que "nadie me reconocía". Sin embargo, pronto todo cambió al ver la reacción de las personas de las que se rodeaba, lo que terminó por desencantarlo de su deseo inicial.
"La gente me empujaba y no era amable. Nadie me decía ‘te quiero’. Tenía que hacer cola para comprarme un café o lo que fuera. Pensaba: ‘Esto apesta. Quiero volver a ser famoso’", aseguró a Vanity Fair.
El actor de 65 años comenzó su carrera actoral en 1978, con 20 año. Su primera actuación fue en un filme de comedia titulado American College. Dos años después participó en la película de terror Viernes 13.
Sin embargo, no fue hasta 1984, a sus 26 años de edad donde salta al estrellato con Footloose. En ese sentido, lleva exactamente 40 años siendo parte de la élite de actores de Hollywood, por lo que para él debe haber sido más fácil acostumbrarse a la fama que al contrario.