El 13 de junio del año 2000, Bon Jovi lanzaba al mundo Crush, su séptimo álbum de estudio y un disco que marcaría un antes y un después en su exitosa carrera.
Con un sonido renovado que fusionaba rock melódico, pop, britpop y glam rock, Crush se convirtió en un éxito rotundo, revitalizando a la banda y consolidando su lugar como una de las agrupaciones más importantes del rock estadounidense.
Un giro musical y estético
Tras cinco años desde su último trabajo discográfico, Bon Jovi reapareció con Crush mostrando una imagen y un sonido renovados.
Dejando atrás el estilo más duro y crudo de sus trabajos anteriores, la banda apostó por un rock más contemporáneo, incorporando elementos de géneros como el pop y el britpop, e incluso coqueteando con el glam rock.
Canciones emblemáticas y un éxito rotundo
El álbum incluyó canciones que se convirtieron en clásicos instantáneos de la banda, como It's My Life, Say It Isn't So y Thank You For Loving Me.
Estos hits conquistaron a sus seguidores de toda la vida y a la vez atrajeron a nuevos fans, consolidando a Bon Jovi como una de las bandas más populares del momento.
It's My Life: Un himno global
It's My Life se convirtió en el sencillo más exitoso de Crush y en uno de los temas más emblemáticos de toda la carrera de Bon Jovi.
La canción alcanzó la cima de las listas en 10 países y vendió más de 16 millones de copias en todo el mundo, convirtiéndose en uno de los sencillos más vendidos de la historia.
Crush: Un disco que sigue vigente
Crush no solo fue un éxito comercial, sino que también recibió elogios de la crítica por su sonido fresco y renovado.
El álbum vendió más de 8 millones de copias a nivel mundial y le valió a Bon Jovi una nominación al Grammy en la categoría de Mejor Álbum de Rock.
A 24 años de su lanzamiento, Crush sigue siendo un álbum icónico en la carrera de Bon Jovi.
Su sonido renovado, sus canciones memorables y su éxito comercial lo convierten en un disco fundamental para comprender la evolución de la banda y su impacto en la música rock.