Alison Mandel fue la encargada del humor durante la primera noche del Festival de Viña del Mar 2024. La humorista nacional regresó al escenario de la Quinta Vergara tras seis años desde su última presentación.
En el escenario realizó una rutina alejada de la política y temas controversiales. Por el contrario, se centró en la maternidad y en bromear sobre su esposo, el también comediante, Pedro Ruminot. Mandel habló sobre lo es que es ser mamá y cómo para ella no ha sido fácil.
En un minuto de la noche reveló lo que la conquistó de su actual pareja. "Yo me enamoré del Pedro inmediatamente apenas lo vi porque tiene algo que no tienen todos los hombres. No sé cómo decirlo para que no suene feo... pero el Pedro es... es flaite", contó Mandel antes de que el público estallara en carcajadas.
Luego complementó: "Y a mí no hay nada que me guste más en un huevón que sea flaite. Que te diga hola con olor a Axe Chocolate. Pero tiene que ser, para que me guste, flaite, flaite flaite".
La comediante nacional se llevó tanto la Gaviota de Plata como la de Oro por su impecable presentación en la Quinta Vergara. De esa forma, entregó un sentido discurso cuando le dieron el primero de sus premios. "La quiero dedicar igual. No es por mí, es por mí y todas mis compañeras. Porque en algún momento cuando fui mamá pensé: 'nunca voy a retomar mi vida laboral'", partió diciendo.
De esa forma, añadió: "Y muchas mujeres piensan lo mismo. Y acá estoy ahora. Así que esto es para ustedes también chiquillas. ¡Muchas gracias!".
Luego de que la comediante terminó su rutina aprovechó de agradecer a su familia, hijos y amigas por el apoyo. Pero sobre todo, agradeció a su marido por apoyarla para llegar hasta el escenario.