La Ley Karin, promulgada tras el trágico caso de la TENS Karin Salgado, busca transformar la realidad laboral en Chile.
Esta nueva legislación, respaldada por el Presidente Gabriel Boric, marca un punto de inflexión para el país.
Nuevas protecciones laborales en la Ley Karin
La norma establece protocolos y medidas concretas para garantizar entornos laborales seguros, adaptándose al Convenio 190 de la OIT y modificando múltiples cuerpos legales, incluyendo el Código del Trabajo y estatutos administrativos.
Según Dolores Irarrázaval, directora Jurídica del Instituto Profesional IACC, la Ley Karin impone la obligación de establecer protocolos de prevención del acoso laboral o sexual y de la violencia en el trabajo, aspectos que antes no estaban presentes en la legislación.
Garantías y protecciones añadidas
La ley refuerza el rol de la Dirección del Trabajo y la Contraloría General de la República en los procedimientos de investigación para brindar garantías a los denunciantes.
Irarrázaval enfatiza en la protección de la privacidad de todos los involucrados durante las investigaciones. Asimismo, recalca que las relaciones laborales deben ser libres de violencia y compatibles con la dignidad de la persona y la perspectiva de género.
Compromiso organizacional por el bienestar laboral
Para Luis Felipe Cordero, miembro de la Junta Directiva de IACC, el compromiso de las organizaciones con el bienestar de sus colaboradores es clave.
Destaca la importancia de monitorear constantemente el ambiente laboral, promover una cultura organizacional respetuosa y establecer normas internas para garantizar la seguridad de todos los trabajadores.
Conciliación y bienestar integral
En el marco de la nueva ley, mejorar la conciliación entre el trabajo y la familia es vital. "La conciliación de la vida laboral y familiar siempre ha sido nuestra prioridad". Así lo asegura Cordero, destacando iniciativas que apoyan la salud mental y una relación saludable entre ambos aspectos de la vida.