Sinéad O'Connor hizo historia al interpretar Nothing Compares 2 U, convirtiéndola en su tema más icónico.
Escrita originalmente por Prince para The Family en 1984, la canción pasó desapercibida en su primera versión, pero encontró un nuevo significado con la potente voz de O'Connor en su álbum de 1990.
La emoción y vulnerabilidad que la cantante irlandesa inyectó en la canción resonó profundamente con el público, llevándola a encabezar las listas de éxito y catapultando su carrera a nivel mundial.
El choque de personalidades
Aunque en público Prince elogió la interpretación de O'Connor y reconoció que la llevó a nuevas alturas, en privado, la relación entre ambos artistas no fue tan armoniosa.
O'Connor reveló que Prince no aprobaba que otros hicieran versiones de sus canciones y que además no la consideraba como una de sus protegidas. Este desacuerdo y el choque de personalidades llevó a un encuentro violento entre ambos en Los Ángeles.
En una entrevista con The Times, O'Connor describió el tenso encuentro: "Tratamos de darnos una paliza... Esto no es una broma, fue una experiencia realmente aterradora. Fue en Los Ángeles, me citó a su casa y tontamente le acompañé. Le incomodaba que yo no fuera su protegida y él quería que lo fuera".
El trauma permanente de Sinéad O'Connor
La trágica experiencia que sufrió O'Connor durante el encuentro con Prince tuvo un impacto profundo en ella.
Como sobreviviente de abuso en su infancia a manos de su madre, este episodio reavivó su dolor y la mantuvo alejada de Prince y sus protegidas.
La cantante dejó en claro que nunca quería volver a ver a Prince después de esa aterradora experiencia.
El éxito abrumador de Nothing Compares 2 U también provocó una oleada de atención mediática y expectativas. Esto la llevó a un aumento de la presión y las luchas internas de O'Connor.
Aunque la canción la catapultó a la fama mundial, también la expuso a un escrutinio implacable y un alto nivel de estrés, lo que la llevó a enfrentar desafíos en su salud mental y bienestar.