La Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) Metropolitana detuvo a Juan Carlos Rivera Contreras, propietario de la Clínica Time de Las Condes, por los delitos de usura y extorsión.
Un reportaje de Bio-Bio reveló que este empresario chileno, de 53 años, operaba como prestamista informal, otorgando préstamos con intereses exorbitantes, que superaban los límites convencionales y legales establecidos para este tipo de transacciones.
Según las investigaciones de la Bridec, se estima que alrededor de 600 personas fueron víctimas de este esquema, lo que resultó en un patrimonio acumulado que supera los 400 millones de pesos.
Tras la detención, se llevó a cabo un allanamiento. En el procedimiento se incautó un automóvil BMW convertible del año 2022, la suma de $11.445.000 en efectivo. Asimismo, 1.804 cheques de diferentes bancos, cinco archivadores con formularios de préstamos y pagarés de los clientes. También, cinco teléfonos móviles de diversas marcas y modelos, así como 11 equipos informáticos y 10 relojes de lujo, valorados en $10.000.000.
"Prestamista VIP"
Según recoge ADN Radio, a Rivera se le conocía como un "prestamista VIP" debido a su facilidad para otorgar préstamos. Sin embargo, exigía cheques o transferencias bancarias, junto con un pagaré en blanco por el monto total de la deuda.
Se suponía que los documentos bancarios serían devueltos o destruidos si el deudor cumplía con los pagos acordados. Sin embargo, según los testimonios de las víctimas, Rivera nunca cumplía con su parte del trato.
El empresario hacía efectivos los pagarés sin importar lo acordado previamente y cobraba sumas millonarias. Además, aquellos que no pagaban a tiempo recibían la visita de su "amedrentador", apodado Elvis. Lo hacía como una forma de intimidación.
Este arresto y las pruebas incautadas permitirán avanzar en las investigaciones para llevar ante la justicia a Juan Carlos Rivera Contreras y esclarecer los delitos de usura y extorsión de los que se le acusa.