El humor en el Festival de Viña del Mar, es uno de los platos fuertes del evento. La reacción del "Monstruo" ante los humoristas es de lo más esperado cada año. Es por esto que este año, luego de dos años sin festival, la parrilla de comediantes ha dado mucho que hablar luego de cancelaciones y cambios de último minuto.
Hoy en Mañana será otro día, conversamos con Rafael Gumucio, director del Instituto del Humor de la UDP, sobre la historia del humor en el festival y sus proyecciones para este año.
El humor en Viña
El escritor comenzó diciendo que" el tipo de humor que se da en viña es muy anómalo, muy raro. Hacer un show frente a un público que no vino a verte a ti es complejo".
Y bajo esta misma línea agregó: "Lo bueno que tiene este 'monstruo' es que si tú lo logras conquistar, se vuelve muy favorable. Es difícil que te vaya más o menos. O te va increíble o te va pésimo".
Sobre la polémica salida de Yerko Puchento del Festival, Gumucio apuntó a que debía una falta de "complicidad" del personaje con el público.
"El humor tiene que ver con la complicidad, uno cuando esta en la complicidad con el otro puede hacer muchas cosas. Uno puede hacer un personaje que caiga mal, un personaje que es pesado, un personaje que es loco (...). Yo creo que este vinculo se ha ido quebrando con los años", indicó.
Al ser consultado por cómo se ha visto afectado el humor por la corrección política, el escritor señaló que ésta en realidad se ha vuelto un chiste en sí misma. "Esta lleno de humoristas que dicen 'oye ya no se puede decir nada', y hacen chistes sobre eso que no se puede decir", bromeó,
Para finalizar, Gumucio se refirió a cómo el humor se ha complejizado debido a las redes sociales y la emergencia del "meme".
"Lo que pasa con las redes es que hay mucho humor, y hay mucho humor divertido. Pero el autor se pierde, o sea somos todos autores. Entonces para el humorista profesional, para el humorista que se dedica a eso es una competencia bien compleja. Y es difícil porque en el fondo la gente está inundada de humor", concluyó.