Johnny Marr rindió un sentido homenaje a su "hermoso" compañero de banda de Modest Mouse, Jeremiah Green. El baterista murió de cáncer la semana pasada.
Muere un gran músico
La muerte de Green fue rápida y sorpresiva para todos. El baterista de la banda fue diagnosticado con cáncer en etapa cuatro en diciembre. Su madre compartió la noticia en Facebook el día de Navidad de 2022. En tanto, Modest Mouse luego confirmó su fallecimiento el 31 de diciembre.
La banda les dijo a los fanáticos: "No sabemos cómo aliviar esto: hoy perdimos a nuestro querido amigo Jeremiah".
Continuaron: “Se acostó a descansar y simplemente se desvaneció. Nos gustaría decir un montón de palabras bonitas en este momento, pero simplemente no es el momento. Estas vendrán más tarde, y de muchas personas”.
El homenaje a Green
En Instagram, Marr, que tocó en la banda con Green de 2006 a 2008, elogió al “gran Jeremiah Green. Mi amigo, compañero de banda y el músico más creativo que he conocido”.
En otro post, Marr contó historias de Green de gira. Así, escribió: “Una de mis cosas favoritas para hacer en Modest Mouse fue salir de compras con Jeremiah. Toda la banda eran las personas más codiciosas con las que me había cruzado en mi vida, y cada gasolinera en la que nos deteníamos era una oportunidad para abastecernos de sombreros, gafas de sol 3D y redes de pesca.
“Estar en Walmart en Mississippi a las 3 a. m. con Jeremiah fue una educación y un placer. Ya que paseaba, eligiendo una variedad de objetos, desde juguetes para niños hasta herramientas de jardín con el aire informal de un experto consumado, y me maravillaba en la diversidad estética del hombre. Cosas para hacer letreros, cosas para hacer cosas y cosas para pegar encima de otras cosas: todo sería arrojado a la canasta”.
Marr agregó: “Cuando regresábamos al estudio, desaparecía con su botín y luego reaparecía días después, luego de haber creado un artículo increíblemente elaborado. Una mañana entré en su habitación y noté algo inusual. Todos los muebles habían sido rociados con oro... las alfombras, las pantallas de las lámparas... todo. Todo estaba rociado de oro. Jeremiah vivía en su propio carril. Su propio y hermoso camino.