A lo largo de 2018, y con producción de Netflix y Skydance, Michael Bay rodó la película 6 Underground en varias localizaciones de Italia como Florencia, Siena, Taranto y Roma.
La cinta se estrenó en Netflix un año después capitaneada por Ryan Reynolds, Mélanie Laurent y Dave Franco, con críticas mejorables entre las que hubo quien no dejó de reconocer la potencia de la secuencia introductoria: una persecución larguísima en las calles de Florencia.
Bay se puso después con Ambulance, estrenada el año pasado, y se distanció de Netflix, pero no ha podido dejar atrás del todo la experiencia de 6 Underground. Todo porque, supuestamente, durante el rodaje murió una paloma.
El caso de la paloma muerta
Según recoge The Wrap, rodando una toma en las calles de Roma una paloma mensajera murió aplastada por una plataforma móvil.
Una persona anónima presenció el incidente, hizo la foto y lo denunció a las autoridades italianas, que exigieron explicaciones a Bay como director de la producción y, por tanto, responsable de la muerte.
Desde entonces el director de Bad Boys y su equipo de abogados han intentado en tres ocasiones que el caso se desestime, pero más de cuatro años después del rodaje de 6 Underground Bay va a comparecer ante un tribunal italiano mientras lo niega todo: "Soy un conocido amante de los animales y un gran activista animal", declara el cineasta.
"Ningún animal involucrado en la producción fue herido o dañado. Ni en ninguna otra producción en la que haya trabajado en los últimos 30 años".
Las palomas son una especie protegida en este país. La ley italiana prohíbe dañar, matar o capturar a cualquier ave silvestre, incluidas las palomas, estando estas protegidas además por la Directiva de Aves de la Unión Europea.
"Tenemos pruebas de video y varios testigos y oficiales de seguridad que nos exoneran de estos cargos”, afirma Michael Bay.
"Hay un proceso judicial en curso así que no puedo entrar en detalles, pero estoy seguro de que prevaleceremos cuando acuda a los tribunales".
Al denunciarse la muerte por primera vez, la policía le dio la opción a Bay de llegar a un acuerdo y pagar la multa, pero el director se negó.
"Me ofrecieron la posibilidad de llegar a un acuerdo mediante el pago de una pequeña multa, pero decliné hacerlo porque no me declararía culpable de haber dañado a un animal", concluye Bay.