El actor Michael J. Fox, conocido por interpretar a Marty McFly en la ya clásica película de los 80' reveló cómo afrontó su diagnóstico de su enfermedad degenerativa en nuevo documental.
En el nuevo documental, "Still: A Michael J. Fox Movie", que fue estrenado en el Sundance Film Festival trata sobre la vida del actor estrella de los 80'. En el filme Fox contó que tomaba pastillas de dopamina "como si fueran dulces de Halloween" para aliviar los síntomas de su padecimiento. Además, durante los rodajes siempre sostenía accesorios para esconder sus temblores.
El actor precisó que se ocultaba de la realidad al tomar pastillas, "sólo había una razón: esconderme. Me convertí en un virtuoso de la manipulación de la toma de medicamentos para llegar al punto crítico exactamente en el momento y el lugar adecuados", señaló.
Fox fue diagnosticado con Parkinson a principios de los 90' pero mantuvo su enfermedad privada hasta 1998. Al recordar el temor de su diagnóstico el actor declaró recurrir al alcohol como mecanismo, "no sabía lo que estaba pasando. No sabía lo que me esperaba. ¿Y qué si podía tomarme cuatro vasos de vino?'. Concluyó, "sin duda era un alcohólico". Con la ayuda de su familia el actor indicó que lleva más de 30 años sobrio.
Relación con Christopher Lloyd
En conversación con Variety, Fox habló de su relación con su co-estrella de "Volver al futuro", Christopher Lloyd. "Chris es un tipo genial. Él es muy enigmático", indicó el actor. Sin embargó, confesó que su amistad no fue inmediata."Me tomó un par de películas el poder conocerlo. Fue en Volver al Futuro III cuando nos conectamos en una forma que no lo habíamos hecho en las otras películas", señaló.
El actor finalizó con "Chris es brillante. Su amor por las películas y ser un actor... No es solo un tipo loco, él es un artista". Los actores tuvieron una reunión en octubre pasado en Comic Con que causó emoción en las redes sociales.