Este martes Cristina Fernández fue encontrada culpable del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública. La actual vicepresidenta argentina fue condenada a 6 años de prisión e inhabilitada de ocupar cargos públicos. Sin embargo, esto es un fallo de primera instancia, por lo que la decisión conocida aún no está en firme.
En Mañana será otro día, Joaquín Morales Solá, periodista y columnista político argentino y autor de diversos libros, entre ellos “Los Kirchner. La política de la desmesura (2003-2008)”, calificó la condena como el primer acto -en mucho tiempo- en que la justicia argentina demuestra que hay justicia. Además, descartó que haya una persecución política y agregó que pese a las palabras de la vicepresidenta asegurando que no será candidata a nada, es probable que vaya a la reelección en el Senado.
No hay persecución política
El juicio de Cristina empezó en el 2008 con la denuncia de la dirigenta opositora Elisa Carrión por asociación ilícita en la obra pública en la provincia de Santa Cruz. Sin embargo, en el proceso legal "hubo muchas demoras porque en ese momento gobernaba Cristina Kirchner, y el organismo que tenía que pasar la información a la justicia era la dirección de Vialidad, que no pasaba la información. Recién en 2015, en el gobierno de Mauricio Macri, Vialidad pasa toda la información que tenía y ahí se reanuda la investigación, que concluye con el inicio del juicio oral en mayo de 2019.
Pese a las denuncias, Morales sostiene que el juicio se hizo en plena legalidad. "De ninguna manera se puede hablar de persecución política. Al contrario, creo que este es el primer acto en mucho tiempo de la justicia argentina que demuestra que hay una justicia en Argentina", sostiene el periodista.
Cuando se llamó a Cristina al tribunal ella lo insultó, le gritó y dijo que ha ella ya la había juzgado la historia y que los que iban a ser juzgados eran los jueces del tribunal. Tuvo todas las oportunidades y todas las garantías, y de ninguna manera se puede hablar de persecución política.
El futuro político de Cristina
Hasta que no haya condena definitiva, esto es hasta que no se pronuncie la Corte Suprema, los derechos electorales y políticos de Fernández siguen en plena vigencia. Esto significa que Cristina Fernández puede presentarse como candidata para las elecciones de diciembre del próximo año. "Ella dijo anoche que no va a ser candidata, pero creo era un minuto en el que estaba alterada. Creo que cuando recapacite un poco va a tomar otra decisión. Probablemente no sea candidata a presidenta, pero sí al Senado", comentó Morales.
"Hoy las encuestas son muy malas para ella. Tiene una imagen negativa en la sociedad de cerca de un 70%, con lo cual lo más probable es que una candidatura presidencial sea una derrota. Y en ese caso quedaría en la interperie frente a los jueces. Una candidatura a senadora en en la provincia de Buenos Aires, que es el lugar donde ella todavía tiene influencia electoral, es más probable, porque puede ser electa ganando o saliendo segunda".
En todo caso, si la ex mandataria es electa como senadora y se pronuncia la sentencia definitiva, la jurisprudencia del Senado establece que tendrá que renunciar o será expulsada para que la justicia aplique la condena. Cristina cumplirá los 70 años en febrero del próximo año, y según el Código Penal argentino, le corresponde hacer arresto domiciliario.
Una líder perdedora
"Cristina ya venía con un liderazgo, si bien el más importante del peronismo, muy menguante por su caída en la opinión en la sociedad argentina. Desde 2009 hasta ahora la mandataria ha perdido 5 elecciones: 2009 legislativa, 2013 legislativa, 2015 presidencial, 2017 legislativa y 2021 legislativa. Solamente ganó las presidenciales de 2011 y 2019. En cualquier otro momento el peronismo hubiese empezado a buscar un liderazgo alternativo, pero hoy no tiene otras opciones".
"La política de Cristina siempre ha sido una de enfrentamiento con la justicia, que no la tuvieron otros políticos acusados, que eran más amables. Cuando este propio tribunal comenzó el juicio, la llamó para que hiciera su primera defensa y ella los retó, los insultó, les dijo que ellos iban a ser juzgados. Ella es así y esa es su manera de hacer política. Confrontando, encontrando enemigos abajo de la cama todos los días, denunciando conspiraciones, esa es su manera de vivir y así la hemos conocido durante los 20 años que lleva liderando el peronismo", detalló el columnista.
La permanencia de Cristina dentro del poder político se esxplica principalmente porque maneja un sector importante de la justicia de fiscales, que responden a ella ideológicamente. Y además tiene un manejo de los servicios de inteligencia del estado. "Esa mezcla de fiscales más servicio de inteligencia pueden crear causas a cualquier político opositor, inclusive dentro del peronismo. Además es una persona sin límites, si tiene que avanzar avanza, no le importan las consecuencias. Eso las ve después".
El rol de Alberto Fernández
El presidente Fernández ha apoyado públicamente a Cristina, llamándola inocente. Pero según Morales, esto es solo una actuación para que Cristina siga de su lado.
"El presidente Fernández es una persona muy débil. Lo fue desde el principio y después él mismo trabajó para profundizar su debilidad. El poco poder que puede tener depende de Cristina Kirchner, que es sin duda la persona más poderosa del país".
"Alberto Fernández se ha convertido en el peor presidente que tuvo la democracia argentina en los últimos 40 años. Pero para llegar al final de su mandato, que le queda un año todavía, depende de ella. Y por lo tanto va a hacer estas sobreactuaciones grotescas de adhesión a ella que en realidad no las siente. Les puedo asegurar que el argentino que más bronca le tiene a Cristina es él, por la cantidad de cosas que le impidió hacer, por la cantidad de funcionarios que le obligó a que se vayan del gobierno y por la cantidad de obstáculos que le ha puesto", finaliza Morales.