Durante el fin de semana se vivió un verdadero terremoto dentro de la Democracia Cristiana. Esto luego de que Claudio Orrego, histórico militante y actual gobernador de la RM, anunciara su renuncia al partido.
La autoridad explicó que una de las razones de su salida fue la mala convivencia dentro de la interna. "Del debate de ideas pasamos a la descalificación personal, de las diferencias ideológicas legítimas a grupos rivales irreconciliables", escribió Orrego en una carta.
En Mañana Será Otro Día conversamos con Alberto Undurraga, diputado de la Democracia Cristiana, sobre el momento actual de la DC y de los efectos que tendría la salida de Claudio Orrego.
Crisis dentro de la DC
"La Democracia Cristiana está en una crisis, de eso no hay duda. Es más amplia que solo el problema de convivencia. En el mundo entero la DC o se moderniza o desaparece, y hemos visto de distintos tipos de modernizaciones. Alemania por ejemplo la modernización es estar permanentemente revisando sus postulados, revisando sus distintas líneas de pensamiento. En Italia y en Bélgica la modernización fue unirse con otros partidos y armar partidos nuevos. Pero en los lugares donde no hay un esfuerzo de modernización finalmente termina desapareciendo como en buena parte de Latinoamérica. Tenemos un desafío de modernizarnos, de hacer una discusión para readecuar lo que es un partido que ha tenido historia para defender la justicia social", contó el parlamentario.
Definiciones
"Lo que tenemos por delante es buscar un acuerdo en dos dimensiones. La primera e inmediata tiene que ver con la actual conducción partidaria, de manera tal que haya una integración que represente distintos sectores. Pero la más importante es ponernos un plazo, y esto no debiera ser más allá de marzo, un plazo para definir qué vamos a hacer como Democracia Cristiana. Ideológicamente nosotros estamos en la centroizquierda, creemos en transformaciones sociales, pero al mismo tiempo con desarrollo económico", indicó el exdirector del Sernac.
Nuevo referente
"Lo que me parece que se adecua más a la realidad chilena es construir un nuevo referente. Ahora no necesariamente puede ser a nivel de partido, puede ser una federación. Pero lo más importante a propósito de la convivencia interna que señala Claudio Orrego al momento renunciar es que esto sea fruto de una conversación. Un acuerdo, no una imposición de uno sobre los otros. Mi posición inicial era un nuevo referente, pero yo creo todavía que es posible hacer cambios por dentro. Espero dar esa pelea en los próximos meses", dijo Alberto Undurraga.
Cambio de nombre
"Eso puede ser una consecuencia. No puede ser un cambio de nombre y no cambiar nada del resto. Eso se llama publicidad engañosa. No puede ser solo un cambio de nombre, es más profundo lo que tenemos que trabajar. Y en esto hay conciencia, como en que el problema existe", finalizó el exministro de Ricardo Lagos.