Luca Guadagnino todavía quiere hacer una secuela de Call Me By Your Name con Timothée Chalamet como Elio, aunque no lo diría en esos términos. "Una secuela es un concepto americano", dijo el cineasta durante una entrevista en el Festival de Cine de Telluride. "Son más bien las crónicas de Elio, las crónicas de este joven que se convierte en un hombre. Es algo que quiero hacer", informó IndieWire.
Call Me By Your Name de 2017 es la cinta que catapultó a Timothée Chalamet al estrellato. Ahora, cinco años más tarde, Guadagnino volvió a trabajar con el actor en Bones and All. La película es una adaptación de la novela caníbal de Camille DeAngelis de 2015, ambientada en los años 80 en el medio oeste de EE. UU. El film es una mirada sensible protagonizada por personajes marginados, como los que pueblan todas las películas de Guadagnino.
Un escuálido Chalamet interpreta a Lee, el astuto interés romántico de su compañera "comedora" y fugitiva Maren (Taylor Russell). Más desaliñado y anticuado que Elio, el personaje de Chalamet aporta una nueva dimensión a su trabajo con el director. Guadagnino dijo que tenía a Chalamet en mente para algún tipo de colaboración incluso antes de que Bones and All se pusiera en su camino.
"No es que dejara a Timothée en la cúspide de su éxito, y luego lo encontrara cuatro años después", dijo Guadagnino. "Nos mantuvimos cerca. Sabía que no había que esperar mucho tiempo hasta que trabajáramos juntos, pero sólo para el proyecto adecuado".
Guadagnino ya se ha encogido de hombros ante los paralelismos entre el tema de su película y las acusaciones caníbales contra el coprotagonista de Call Me By Your Name, Armie Hammer.
Mientras que la carrera de Chalamet ha implosionado, Guadagnino se ha mostrado entusiasmado con el poder de la estrella. "Ver la humildad y el rigor con el que dio sus primeros pasos hacia el estrellato -este joven brillante y febril se convirtió en una estrella planetaria- me hizo sentir muy orgulloso", dijo Guadagnino.
Aunque la premisa de Bones and All podría asustar a los espectadores aprensivos, Guadagnino suele cortar los momentos más sangrientos, aunque dijo que tenía mucho material que podría haber utilizado. "Teníamos mucho más", dijo. "Rodé mucho más, pero en el proceso de montaje, mi editor y yo siempre tuvimos claro que nunca debíamos ser egoístas en cuanto a nuestra capacidad de retratar el horror. Había mucho dolor en los personajes, una especie de reverencia sagrada. Era muy hermoso, humilde, reverencial".
Aún así hay mucha sangre. A Guadagnino no le preocupaba perturbar al público. "Creo en la inteligencia de la gente", dijo. "No quiero poner al público en una situación pasiva. Me gusta que el público sea activo con la película. Si eso se consigue, tengo la posibilidad de expresar complejidades que podrían parecer intolerables".
Chalamet no pudo recorrer el circuito completo de festivales con Bones and All debido a que se encuentra grabando Dune: Parte 2, aunque se presentó en Venecia.