Los aviones supersónicos dejaron de realizar vuelos comerciales en 2003 con el último viaje del Concorde, pero parecen estar más cerca que nunca de volver. La compañía Boom Supersonic anunció Overture, su propuesta para que los vuelos comerciales supersónicos regresen.
"Volando al doble de la velocidad de los aviones de pasajeros de hoy, Overture abre la puerta a un mundo dramáticamente más accesible, donde podemos experimentar de primera mano a las personas, lugares y culturas", indicó la compañía con bombos y platillos.
La aeronave empezará a producirse en 2024.
Overture, el avión supersónico
Overture es el resultado de recientes innovaciones en aerodinámica, reducción de ruido y mejor rendimiento que los Concorde.
Cuatro motores, fuselaje contorneado y alas de gaviota lo preparan para alcanzar velocidades supersónicas de Mach 1.7 sobre el agua.
Overture podrá llevar entre 65 y 80 pasajeros con una autonomía de 4.250 millas náuticas (7.871 kilómetros).
Todo esto con combustible sostenible de aviación.
Especificaciones de Overture
- Velocidades crucero: Mach 1.7 supersónica, Mach 0.94 subsónica
- Rango: 4.250 millas náuticas
- Pasajeros: 65 a 80
- Dimensiones exteriores: 61.2 metros de largo, alas combinadas de 32 metros y altura de 10.9 metros.
¿A dónde volará el Overture?
El avión seguiría el camino del Concorde, especializándose en rutas como Nueva York – Londres que tardarían 3 horas y media, la mitad de las 7 que toma realizarlas en aviones tradicionales.
Overture podrá aprovechar su velocidad Mach 1.7 sobre el agua, mientras que tendrá velocidades subsónicas sobre tierra.
Uno de los principales problemas de los aviones supersónicos son los booms sónicos, ondas de choque producida luego de que un objeto pasa la velocidad Mach 1.
Esto hace que no sea tan factible aprovechar las velocidades supersónicas en vuelos que no sean sobre el agua, aunque Overture promete una operación menos ruidosa al despegar y aterrizar.
¿Qué pasó con los Concorde?
Los Concorde fueron el resultado de colaboración de las industrias de Reino Unido y Francia, logrando su primer vuelo en 1969.
Pan Am, BOAC, American Airlines, Qantas, United Airlines, Braniff, Air Canada y demás aerolíneas reservaron unidades, pero terminaron cancelando la orden. La crisis del petróleo de 1973 fue uno de los principales factores.
El avión supersónico empezó a realizar vuelos comerciales en 1976, siendo operado tan solo por British Airways y Air France.