La cafetera italiana es clásica para los amantes del café. Es la favorita predilecta. Y es que, aunque hoy existen muchas formas de hacer café, pareciera ser que ninguna supera a la cafetera italiana en aroma ni sabor.
Si tienes una y aún no logras ocuparla de forma o correcta, o te da miedo manipularla, acá te enseñamos cómo sacarle provecho a esta maravillosa cafetera.
¿Cómo hacer buen café?
Primero que todo, hay que dejar claro que con ella es realmente sencillo hacer un café intenso y con cuerpo, capaz de satisfacer el paladar de los más cafeteros.
Pasos a seguir:
En primer lugar, deberás comprobar que la cafetera italiana está en perfectas condiciones. Para eso, fíjate en que el filtro, que está en su interior, está completamente limpio. Así, el filtrado se realizará correctamente. Observa también que el tubo o 'chimenea' de la pieza superior no está obstruido por nada. Finalmente comprueba, que las dos piezas, inferior o depósito y superior, encajan perfectamente al enroscarlas.
En segundo lugar, separa las tres piezas, tenlas preparadas y pon agua a calentar en una olla o lo que tengas a mano. Cuando esté ligeramente templada (sin hervir), viértela en el depósito de la cafetera hasta la altura de la pequeña válvula, semejante a un tornillo, que verás en el interior de la cafetera.
Luego, toma el filtro y rellénalo con café molido. El café debe alcanzar el borde sin sobrepasarlo. Retira el posible exceso pasando un cuchillo a ras de la superficie. Así, introduce el filtro en el depósito donde está el agua precalentada.
Posteriormente, con una servilleta o paño, retira del borde los posibles granitos de café que haya podido quedar. Luego coloca la parte superior y enrosca para cerrar herméticamente la cafetera italiana.
De esa forma, ponla a fuego medio con la tapa abierta. En unos minutos, verás como el café empieza a emanar del tubo central de la cafetera, primero lentamente y después, a mayor velocidad. Cuando escuches el café saliendo, es momento de cerrar la tapa y retirar tu cafetera italiana del fuego.
Deja el café reposar unos segundo, para que el café termine de llegar a la parte superior y ya está, tienes un potente café de cafetera italiana, con un aroma inconfundible y hecho en apenas 10 minutos.
Consejos:
- Fíjate en el estado de la goma que está en la pieza superior, que es la que permite el cierre hermético. Debe ser de color blanco, no amarillento o gris, ya que, si presenta estas tonalidades puede estar desgastada y es necesario cambiarla.
- El café que requiere una cafetera italiana es siempre café molido de textura fina (tipo granos de azúcar o sal de mesa).
- Aunque puedes utilizar agua de la llave, es recomendable que utilices agua mineral.
- El secreto de un café perfecto en cafetera italiana está en poner atención al momento en el que el café líquido comienza a brotar en la parte superior. Cuando veas que ya no sale más, la cafetera no debe permanecer al fuego ni un minuto porque el café nunca, pero nunca, debe hervir.