El vestido que la cantante Amy Winehouse usó en su última actuación se vendió el domingo en 243.200 dólares, 16 veces su valor estimado, como parte de un conjunto de recuerdos de la fallecida diva subastados en California.
Winehouse lució un vestido verde y negro con estampado de bambú en el concierto en Belgrado en 2011, según recoge NME.
Un mes después, el 23 de julio, murió de una intoxicación etílica aguda, a los 27 años de edad.
Su muerte fue la culminación de una lenta – y muchas veces pública – batalla contra el alcohol y las drogas.
El vestido fue la principal pieza de una colección de 800 objetos personales que van desde brasieres y DVD hasta libros y maquillaje, vendidos por los padres de Winehouse, Mitch and Janis.
La colección completa reunió unos cuatro millones de dólares, dos veces lo planeado, según la casa de subastas Julien’s, encargada de la venta entre sábado y domingo.
"Claro, hay fanáticos, museos y coleccionistas alrededor del mundo que querrán poseer algunos de esos objetos. Cuidarlos, mostrarlos en museos, mantener vivos su legado y memoria. Y, al tiempo, recaudar dinero para la fundación", dijo antes de la subasta Martin Nolan, de Julien’s.
El dinero irá a la fundación Amy Winehouse, que apoya a jóvenes vulnerables que luchan contra alguna adicción.
"Todos esos vestidos representan a Amy, fantástica música, compositora, pero también ícono de la moda", agregó Nolan.
Ganadora de varios premios Grammy, Winehouse, cuyo conmovedor álbum Back to Black de 2006 es considerado como un clásico moderno, habló seguido de su experiencia de lucha contra la adicción a la droga y el alcohol.