La publicación de los llamados "Papeles de Facebook", que ahondan en la forma en la que la compañía antepuso sus ganancias a la seguridad y la desinformación, redoblaron la presión sobre su consejero delegado, Mark Zuckerberg.
Los documentos, que publicó un consorcio de 17 medios que incluye a la CNN, el New York Times y el Washington Post, están aportando nuevos detalles a las filtraciones de una exempleada de la compañía, Frances Haugen. La publicación la hizo hace semanas The Wall Street Journal.
La política de anteponer los resultados económicos a la seguridad en la red, la falta de control frente a la desinformación o la ausencia de medidas de precaución internas justo antes del asalto al Capitolio son algunas de las cuestiones que se destacan en las nuevas publicaciones sobre la red social.
La compañía se defendió de la publicación de los "papeles". Insistió en un comunicado en que "la premisa de todas estas historias es falsa". Porque aunque Facebook sea un negocio que trata de lograr beneficios, la idea de que lo hacen a costa de la seguridad o el bienestar de las personas "es una mala interpretación".
Nuevas revelaciones en los "Papeles de Facebook"
Entre las nuevas revelaciones se destaca que la empresa apenas dedica recursos a combatir la información falsa fuera de Estados Unidos. Y su efectividad es casi nula en países en vías de desarrollo como la India. En este momento, es el país con más usuarios de Facebook del mundo.
Según un informe elaborado por la propia compañía, en 2020, 84% de las actuaciones contra información falsa en Facebook e Instagram (de su propiedad) ocurrieron en Estados Unidos. Esto, pese a que la gran mayoría de sus usuarios se encuentran fuera de ese país.
Los documentos también describen cómo la empresa cayó en la desidia tras las elecciones presidenciales en Estados Unidos de noviembre pasado. Y desactivó medidas de precaución antes del asalto al Capitolio del 6 de enero.
Según las informaciones publicadas, muchos de los trabajadores que durante los meses previos a los comicios habían formado parte del equipo de prevención contra noticias falsas y contenidos de odio, se tomaron excedencias o cambiaron de cargo tras las elecciones.
Además, Facebook dio marcha atrás con decenas de medidas que había activado para evitar el caos en la jornada electoral como la supresión de ciertos grupos. Y el equipo de integridad cívica fue prácticamente desbandado por temor a las críticas. Sus miembros las dedicaban con cada vez mayor frecuencia a la propia empresa.
Buenos resultados pese a malas prácticas
La información contenida en los "papeles" también ofrece más detalles sobre la falta de recursos destinados por la empresa a eliminar discursos de odio. Indica que hace dos años la firma redujo el tiempo que los moderadores humanos dedican a revisar las quejas de los usuarios por este motivo.
Los propios empleados de Facebook manifestaron en comunicaciones internas su escepticismo sobre la posibilidad de que en el futuro la red social llegue a poder identificar de forma eficaz la mayoría de los contenidos de odio en la plataforma.
Así, según las estimaciones de un empleado, los sistemas automáticos de control eliminan contenidos que solo generan 2% de las visualizaciones de discursos de odio en la plataforma. Mientras que las estimaciones de otro grupo de empleados en marzo de este año elevan ese porcentaje a entre 3% y 5%.
Pese al intenso escrutinio que está recibiendo por la prensa y los políticos, Facebook sigue ganando usuarios y disparando sus beneficios. En los primeros nueve meses del año, estos subieron 62% con respecto al mismo período de 2020.