El abogado de Rodrigo Rojas Vade, Tomás Ramírez, expuso con documentos este miércoles la real situación de salud del constituyente.
En conversación con El Mercurio, el defensor precisó que el 8 marzo de 2013 Rojas Vade fue diagnosticado de sífilis.
Cabe recordar que hace algunas semanas, el vicepresidente de la Convención Constitucional reveló que no tenía cáncer, pero sí una enfermedad con estigma social, lo que muchos creían era VIH.
"Tiene un estigma social, es una enfermedad (la sífilis) de la que no se sabe mucho", aseguró Ramírez.
Además, el abogado de Rojas Vade detalló que a lo largo de los años, su representado ha tenidos múltiples enfermedades, entre ellas, la Enfermedad de Behcet y la Púrpura Trombocitopénica Ideopática.
"Esto no implica que sea su diagnóstico definitivo. Sobre todo teniendo presente que ahora, con toda la información, probablemente deba reiniciar un trabajo con distintos especialistas", comentó.
Ramírez aclaró que la revelación no cambiaría el escenario judicial que enfrenta el convencional en la investigación que lleva el Ministerio Público para determinar si incurrió en el delito de perjurio o no.
El diagnóstico de Rodrigo Rojas Vade
Uno de los ejes de la indagatoria que dirige el fiscal jefe del Centro de Justicia de la jurisdicción metropolitana Centro Norte, Patricio Cooper, gira en torno a las verdaderas enfermedades que sufre Rojas. Por lo que ya requirió al Ministerio de Salud su historial de atenciones médicas.
El abogado Ramírez aseguró que entregarán los documentos que acreditan las dolencias. Pero detalla que aún está a la espera de un diagnóstico definitivo. Y que Rojas Vade ha tenido graves síntomas como "cefaleas, náuseas, ulceraciones, afectaciones a la piel. Y problemas de coagulación que se manifiestan con pérdida de sangre. Ha debido ser hospitalizado varias veces. Esto, tanto en la Clínica Alemana como en la Clínica Bupa, donde logran que se recupere y le hacen exámenes para descartar otras patologías".