Mick Jagger parecía cualquier otro ciudadano estadounidense con jockey de béisbol y jeans mientras bebía una cerveza en uno de los bares más famosos de Charlotte, EEUU, el miércoles por la noche.
Sin fans ni guardias de seguridad a su lado, el líder de los Rolling Stones pudo disfrutar del aire nocturno en el patio del bar Thirsty Beaver Saloon.
Otros clientes sentados en una mesa y en bancas cercanas parecían ignorar al ícono del rock 'n' roll. De hecho, miraron para otro lado cuando alguien tomó una foto que Jagger luego subió a Instagram y Twitter.
Habla el dueño
La pregunta que muchos se hicieron fue: ¿habrá Jagger arrendado el bar y esos "clientes" eran parte de su equipo?
"Absolutamente no", dijo Brian Wilson, copropietario de The Thirsty Beaver, a The Charlotte Observer.
Resulta que los cuatro o cinco clientes que aparecen en la foto de Jagger no tenían idea de que era él, dijo Wilson. "Él estaba aquí y luego se fue", le dijo al dueño del local uno de los clientes habituales que estaba allí.
El bar no tenía aviso previo de que Jagger pasaría, e incluso el camarero no tenía idea de que era él cuando le sirvió una cerveza, dijo Wilson.
Wilson dijo que la única razón de la que por qué el icónico cantante hubiera llegado al lugar es que alguien se lo haya sugerido. Esto, porque Jagger podría beber en paz allí, dada su mezcla típicamente ecléctica de clientes que probablemente dejarían en paz a una leyenda musical como el.