La crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus ha hecho que varios tengan que buscar alternativas para generar ingresos. Y no porque The Beach Boys sean estrellas de la música, no tienen problemas económicos.
Es así como la banda se sumó a la tendencia al ceder una participación mayoritaria en toda su propiedad intelectual.
Según reporta la revista Rolling Stone, la decisión fue tomada por Brian Wilson, Mike Love y Al Jardine junto con Jonah y Justyn, hijos de Carl Wilson (herederos del artista fallecido en 1998); quienes vendieron las grabaciones maestras de la banda californiana, sus derechos de publicación y su marca en sí a la empresa Iconic Artists Group.
Lejos de abandonar sus expectativas de ganancias con el legado del grupo, The Beach Boys buscan potenciarse en ese aspecto.
"Ellos pueden tomar la decisión final sobre las decisiones comerciales, que es lo que en verdad necesitamos, o lo que hemos necesitado, debería decir", comentó Jardine ante la prensa. Ya en años anteriores los autores de himnos como "Good Vibrations" habían intentado sostener emprendimientos como restaurantes y líneas de ropa, pero, tal y como reconoce Al, los mismos "quedaron completamente destruidos".
Al parecer ninguno de los integrantes de la formación tiene buena mano para los negocios, según admitió el citado músico: "Pienso que hemos sido geniales en lo musical, pero quizá no tanto como podríamos en la promoción de nuestra marca".
Lejos de bajonearse ante su mala situación económica, The Beach Boys se preparan para celebrar su aniversario número 60 y Brian señaló que le gustaría reunirse con sus compañeros, pues se siente más enérgico que nunca tras recibir la primera dosis de la vacuna contra el Covid-19: "Cuando salimos de gira por el aniversario 50 nos divertimos mucho. Sería un placer volver a cantar con los chicos", señaló el músico.