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Nano Calderón no se arrepiente de nada y continúa estudiando Derecho

Por medio de historias de Instagram, Nano Calderón mencionó que no se arrepiente de nada y que continúa estudiando Derecho.

Por medio de su cuenta de Instagram, Nano Calderón, quien está bajo libertad vigilada tras evitar la cárcel, contestó algunas preguntas de su seguidores, generando polémica por sus respuestas.

Y es que uno de sus seguidores le preguntó: "A lo largo de tu vida… ¿hay algo de lo que te arrepientas?". Ante esto, el hijo menor de Raquel Argandoña respondió con un simple "No".

Junto a esta pregunta, otra persona le consultó cómo estaba afrontando sus estudios universitarios, y si continuaría con su carrera universitaria, a lo que Nano dijo: "Sip, de hecho sigo estudiando Derecho". 

Además, Nano respondió que él sí se considera una persona solidaria, pero "no soy de alumbrarlo. Encuentro que no hay nada más penca que los wns que graban esas cosas". Ante esta respuesta, se sospecha que hace alusión al voluntariado que ha realizado su hermana Kel, quien recordemos usa sus redes sociales para promover su cruzada solidaria ‘Redes en caja’.

Nano Calderón fuera de la cárcel

Tras el violento ataqué que realizó Nano Calderón contra su papá, el abogado Hernán Calderón el pasado agosto de 2020, tuvo que cumplir prisión preventiva por parricidio frustrado en el penal Santiago 1, para luego continuar con arresto domiciliario total. 

Fue debido a esta condena que ingresó a la Clínica Psiquiátrica Pocuro, recinto ubicado en la comuna de Vitacura, pero tras un acuerdo por parte de su defensa con la fiscalía, Nano fue condenado solo por los delitos de amenazas, daños y lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar, que terminaron en una pena de 541 días y dos de 60 días, que tendrá que cumplirlas en “libertad vigilada intensiva” según determinó el tribunal.

Además quedó con una serie de penas accesorias (secundarias) como la prohibición acercarse a la víctima por 6 mesesprohibición de tenencia de armas de fuego por 2 años y continuar con la terapia para el control de impulsos. Esto sumado a la multa de una UTM (51.029 pesos) por el delito de daños.


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