La telenovela de la familia West-Kardashian tiene un nuevo capítulo. Luego de la bullada crisis matrimonial que se hizo pública en julio y que llevó a que incluso se hablara de divorcio, todo parecía haberse calmado. Tras eso, Kim y Kanye pasaron unos días juntos de vacaciones, una escapada familiar con sus cuatro hijos que parecía estar siendo beneficiosa.
La pareja y sus cuatro hijos volaron en un jet privado hasta República Dominicana, lugar idílico donde estuvieron unos días descansando y pasándolo en grande. Hasta compartieron un video en el que West y su hija mayor North West bailaban y reían.
Pero parece que el matrimonio está lejos de una reconciliación. Terminadas sus vacaciones, cada uno ha hecho caminos separados. Kanye regresó a su rancho de Wyoming ya que "es donde quiere estar", como afirmó una fuente cercana a People, y Kim volvió a Los Ángeles.
La celebridad quiere estar en California porque es el lugar donde quiere criar a sus hijos y eso está siendo un punto de desencuentro con su marido, ya que él siente la necesidad de retirarse de los focos y del ritmo de vida que hay en la gran ciudad.
Además, el rapero sigue con su propósito de presentarse a la presidencia de los Estados Unidos, algo que a su esposa no le hace ninguna gracia y que también ha sido motivo de discusión entre ellos. Así, parece que las cosas están lejos de solucionarse entre ellos.