Por Ramón Pozo
Hasta que se concretó el cambio de gabinete. De este modo y tras 9 meses en el cargo, Gonzalo Blumel dejó el ministerio del interior para darle paso al ahora exsenador UDI, Víctor Pérez.
Otros de los movimientos que más llamaron la atención fueron la designación de Mario Desbordes en el ministerio de defensa, y de Andrés Allamand en relaciones exteriores.
Jaime Bellolio también dejó el congreso para asumir como vocero, con Karla Rubilar yéndose a desarrollo social.
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Para el doctor en ciencia política y académico de la universidad de Milan, Kenneth Bunker, éste "es un cambio de gabinete para los propios", donde "entraron los conservadores y se debilitaron los liberales".
Por tanto, esta movida "es mucho más importante en lo estratégico. Es una señal clara de un giro a la derecha". Dicho en simple, "Piñera se dio cuenta que no tiene mucho más que hacer que defender lo que le queda".
“El equipo que entró es mucho más defensivo”, insistió el analista.
El proyecto del retiro del 10% de las AFP fue decisivo, ya que "fue un gol de media cancha de la oposición", donde Mario Desbordes "de alguna forma aportó a desalinear" al oficialismo.
Para Bunker, este ajuste de secretarios de Estado "incorpora la neutralización de la disidencia" en Chile Vamos, "del díscolo" que sería Desbordes.
¿Y qué hay de la influencia de Andrés Allamand? A juicio del experto, él "no tiene por qué tener una voz en los medios para tener influencia".