“Moriré como un competidor. Competir está por encima de todo para mí”, dice Thierry Henry en una reciente entrevista con el sitio de la Champions League y que explica en parte por qué dejó el Arsenal y fichó por el Barcelona en 2007.
El francés asegura que está eternamente agradecido por Arsène Wenger y el cariño de los hinchas del cuadro inglés, sin embargo, admite que quería ganar trofeos y sabía que en el club azulgrana podía conseguirlos.
“Amo el fútbol, soy un aficionado del Arsenal y amo el Arsenal, pero competir está por encima de todo. Es lo que me empuja, es lo que me hace mejor y es lo que me reta. No tengo miedo de nada”, agrega el actual DT del Montreal Impact de la MLS.
El ex delantero fue testigo de la llegada de Pep Guardiola al Barcelona y considera que el catalán y el francés fueron los dos entrenadores que lo hicieron ver el fútbol de una forma totalmente diferente.
“Arsène activó mi cerebro y cada día trataba de hacerme las preguntas correctas. Y después está Pep Guardiola, quien activó mi cerebro a nivel táctico. Esas dos personas han tenido un enorme impacto en mí”, asegura según recoge Mundo Deportivo.
Henry reconoce que antes de transformarse en pupilo de Guaridola pensaba que conocía el fútbol, sin embargo, el actual DT del Manchester City le demostró que estaba equivocado.
“Yo creía que conocía el fútbol, pero cuando llegué al Barcelona fui desprogramado y reprogramado. Y eso no significa que no quiera al Arsenal o que no sea un aficionado del Arsenal o que mi corazón no vaya a estar siempre allí… pero en el Barça fue tan especial”, dice.
Y claramente el cuadro catalán fue un lugar especial, ya que junto a Lionel Messi, Carles Puyol, Xavi Hernández, Samuel Eto’o y Andrés Iniesta consiguió su primera y única Champions League luego de vencer al Manchester United en 2009.
“Esa final era muy especial para mí. La gente no lo sabe, pero era el cumpleaños de mi hija y yo no había ganado nunca la Champions como todo el mundo sabe”, agrega.