Ben Campbell, es un estadounidense que decidió que la mejor manera de reírse un poco dadas las circunstancias de confinamiento era comprándose unos enormes dientes postizos de broma.
Lo que en un inicio iba a ser un par de risas delante del espejo, se ha convertido en carcajadas virales gracias a su perro, Thomas, que "robó" los dientes de encima de la mesa donde Ben los había dejado. Uno podría pensar en mil cosas que podrían haber pasado con los dientes, como que los destrozara o los escondiera en algún sitio, pero no, Thomas se los puso.
El can apareció con la dentadura colocada perfectamente y volvió donde su dueño, al que le provocó un ataque de risa. Como era de esperar, el cómico momento no podía quedarse en la intimidad de su hogar, y Ben decidió grabar a Thomas para publicarlo en su cuenta de Facebook y que sus seguidores también pudiesen disfrutar de ese gran momento.
El video, que ya se ha convertido en viral, con casi dos millones de visualizaciones, muestra a Thomas con los dientes y a su dueño riéndose mientras le pregunta qué está haciendo.