Por Ramón Pozo
Uno de los efectos que más se está sintiendo del coronavirus ha sido en el ámbito del trabajo.
No sólo por las labores a distancia que muchos se están acostumbrando a realizar, sino también por las consecuencias negativas en diversas actividades económicas como la gastronomía, el comercio, el turismo, importaciones, entre otras.
En este escenario, el subsecretario del trabajo, Fernando Arab, admitió que en febrero, “los despidos por necesidades de la empresa se duplicaron en relación a febrero del año pasado". No obstante, apuntó que "hoy día las cifras de desempleo no han variado de manera relevante".
De todos modos, acotó que la proyección para corto y mediano plazo es que “el empleo se va a ver afectado”.
Así, la autoridad ahondó en las posibilidades de negociación e indemnizaciones. Por ejemplo, si algunos empleadores apelan a despedir por fuerza mayor, la catástrofe "tiene que ser de carácter permanente". Pero "si va a durar 2 o 3 semanas, parece evitable" la desvinculación por ese motivo.
"¿Se puede negociar con los trabajadores una reducción de salario? Sí, se puede negociar. Pero tiene que ser de común acuerdo" entre empleador y trabajador, detalló Arab.
Sobre iniciativa para llegar a acuerdo, rebajar sueldos a la mitad y complementarlos con seguro de cesantía, indicó que "lamentablemente ese proyecto no ha avanzado" en el congreso.
Adicionalmente, explicó que "cuando exista acuerdo de las partes, se puede suspender la relación laboral". En ese contexto, trabajadores pueden cobrar seguro de cesantía.
"Vamos a incorporar más de 2 mil millones de dólares al fondo de cesantía solidario", anunció. También "vamos a flexibilizar los requisitos" para cobrar este beneficio social.