La propagación del coronavirus tiene a las naciones de todo el mundo en alerta, más aún viendo la realidad de los países más afectados, como España. Ese es el temor que tienen las autoridades de las naciones en que el virus aún no llega a su peak. Uno de los lugares que se cree podría resultar tanto o más afectado que Italia es la ciudad de Nueva York.
Los casos de infectados en la Gran Manzana tuvieron un alza esta última semana, pasando de 1.000 a 4.000 casos en cuatro días. Aunque el gobernador del estado, Andrew Cuomo, explicó que esta alza se debió al aumento de la realización de pruebas, se teme que se necesiten más de 100.000 hospitalizaciones, de los cuales un tercio de los pacientes podrían requerir tratamiento en UCI, según informó la prensa.
La advertencia ya viene desde Italia, donde el médico Roberto Rona, director de terapia intensiva en el Hospital de Monza, dijo que el coronavirus “no es una ola, es un tsunami”, como una forma de graficar el peligro que representa el covid-19.
Según los datos que entregó el gobernador Cuomo, el peak de infectados llegaría en las siguientes seis semanas. Ante este posible escenario, la ciudad ya se está preparando para que el golpe no sea tan duro.
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Por ejemplo, ya cerró bares, restaurantes, gimnasios y lugares de ocio. Además, prohibieron las reuniones de más de 50 personas y pidieron a las personas que se queden en sus casas.
“Tenemos 19.5 millones de personas. Las proyecciones de los expertos muestran este rango siguiendo la actual tasa de diseminación: se espera el pico en 45 días; se espera que por entonces se necesitarán entre 55.000 y 110.000 camas de hospitales”, dijo Cuomo.
El problema es que el sistema de salud no cuenta con ese número de camas, por lo que hasta el momento la ciudad no estaría preparada para enfrentar tal escenario.