El cambio climático y la actividad humana han tenido un efecto devastador entre la población de osos polares en el Ártico. Y es que a medida que el deshielo avanza y la falta de alimento se acrecienta, estos animales se han visto obligados a matarse y comerse entre sí.
"Los casos de canibalismo de osos polares son un hecho estudiado desde hace tiempo, pero nos preocupa el aumento de los casos que antes eran una rareza", dijo Ilya Mordvintsev, investigador del Instituto Severtsov de Ecología y Evolución.
Durante una conferencia en San Petersburgo, Mordvintsev sugirió que este comportamiento puede deberse a la falta de comida, aunque también podría deberse a la actividad humana en el Ártico.
Por su parte, Vladimir Sokolov, un científico ruso que ha dirigido numerosas expediciones con el Instituto de Investigación del Ártico y el Antártico, explicó que este año los osos polares han sufrido el aumento de temperaturas en la isla de Spitsbergen, al norte de Noruega, donde el hielo se ha derretido y quedaba muy poca nieve.
El investigador predice que los osos polares tendrán que dejar de cazar en el mar helado y se verán confinados a las orillas de los lagos y los archipiélagos cercanos al polo.
Otros tantos expertos han registrado el aumento del número de osos polares que se han trasladado de su territorio habitual de caza debido al deshielo causado por el cambio climático, recoge La Vanguardia.
Durante los últimos 25 años, los niveles de hielo del Ártico han caído un 40%, según Sokolov, lo que ha hecho cada vez más difícil la vida para los osos polares.