Unos dirán que fue un despropósito, otros que un acto de rebeldía y algunos que un gesto de justicia. Se trata de un joven que fue arrestado por posesión de marihuana y que durante el juicio en su contra no encontró nada mejor que fumarse un pito en el estrado.
Spencer Boston, de 20 años, acudió a la oficina del sheriff del condado de Wilson, en Tenessee, Estados Unidos, a declarar por el delito que se le acusaba. Entonces, frente al juez, comenzó a expresar su punto de vista de por qué debería ser legalizada la marihuana.
Para resaltar su defensa, sacó un cigarrillo de marihuana y lo encendió. Antes de que los guardias allí presentes lo esposasen, Boston pudo dar varias caladas al porro.
Tras ser escoltado fuera de la corte, volvió dentro y desde la galería declaró: "¡La gente merece algo mejor!" Según contó el teniente Scott Moore a CNN, en ese momento los presentes en la corte se echaron a reír, recoge 20 Minutos.
La oficina del sheriff presentó cargos por conducta desordenada, posesión de marihuana y desacato. Por esto último tendrá que cumplir con 10 días de prisión y pagar una multa de 3.000 dólares.