Robert De Niro fue demandado por discriminación de género, luego que una exempleada fue despedida de su empresa por presuntamente ver televisión en el trabajo.
Graham Chase Robinson, expresidenta de producción y finanzas, fue despedida de Canal Productions después de ser acusada de pasar una cantidad "asombrosa" de tiempo viendo programas en Netflix, incluidos 55 episodios de Friends durante un período de cuatro días en enero. La compañía presentó una demanda contra Robinson por "incumplimiento de sus deberes fiduciarios, violación de la doctrina del servicio infiel y conversión". Pero ahora, es la extrabajadora quien contra-demandó al actor.
En el documento, obtenido por The Hollywood Reporter, Robinson afirma que De Niro usó un lenguaje sexista e hizo comentarios inapropiados en el lugar de trabajo. Ella alega que él la describió como una "perra" y una "mocosa", se refirió a ella como su "esposa de oficina", bromeó sobre su receta de Viagra y la sometió a "Contacto físico no deseado gratuito" y "comentarios con carga sexual". Robinson también afirma que le pagaron mal en comparación con sus compañeros de trabajo hombres.
"Robert De Niro es alguien que se ha aferrado a las viejas costumbres", dice la demanda. “No acepta la idea de que los hombres deben tratar a las mujeres como iguales. No le importa que la discriminación de género en el lugar de trabajo viole la ley. La Sra. Robinson es una víctima de esta actitud".
La exempleada niega las afirmaciones hechas sobre ella en la demanda presentada en su contra, que también la acusa de malversación del dinero de la compañía y millas de viajero frecuente. En su contra-demanda, Robinson asegura que De Niro aprobó toda transacción que había hecho y que nunca había visto Netflix en el trabajo.
"Ahora, cuandobuscas su nombre en Google, estas acusaciones aparecen en la pantalla", expone el nuevo documento. “Los resultados han sido devastadores para la Sra. Robinson. Su reputación y su carrera han sido destruidas ".
La mujer busca al menos $12 millones de dólares en daños. En respuesta a la demanda, el abogado de la estrella de Hollywood, Tom Harvey, señaló: "Las acusaciones hechas por Graham Chase Robinson contra Robert De Niro son más que absurdas".