Gran conmoción ha causado el caso de un anciano que conducía a exceso de velocidad para ayudar a su hijo con cáncer.
Su testimonio se dio a conocer cuando llegó hasta el tribunal de Rhode Island para dar su versión de los hechos al juez municipal Frank Caprio.
"No conduzco tan rápido. Tengo 96 años y voy despacio. Sólo conduzco cuando es necesario", explicó el anciano llamado Víctor Coella.
Finalmente reveló por excedió los límites de velocidad en su vehículo: Tenía que llevar su hijo de 63 años a realizarse exámenes de sangre pues padece de cáncer.
"Usted es un buen hombre. Tiene 90 años y se preocupa por su familia", le dijo el magistrado al conocer su historia, desestimando la denuncia.
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