Después de 31 años, Japón volvió a la caza de ballenas con fines comerciales. El país realizó su primera expedición ballenera este lunes, algo que no ocurría desde 1988.
Japón había respetado un acuerdo de la Comisión Ballenera Internacional —IWC, por sus siglas en inglés—, la cual prohibía la caza de estos animales con fines comerciales. Sin embargo, en septiembre del año pasado se retiraron de la organización, después de que su propuesta de retomar la caza comercial de aquellos cetáceos que ellos consideraban abundantes —como la especie minke, la rorcual Bryde y la rorcual común— fuera desestimada.
La salida del país se hizo efectiva este domingo y a primera hora del lunes los balleneros se hicieron a la mar, en busca de ejemplares de estas tres familias.
La determinación provocó quejas de muchas organizaciones medioambientales, que aprovecharon la celebración del G20 en Osaka para hacer constar su descontento, informa El País.