El gobierno anunció el cierre de 8 centrales termoeléctricas para 2024, mientras que las restantes dejarían de funcionar en 2040. Ello, con el objetivo de descarbonizar nuestra matriz energética.
La ministra de energía, Susuana Jiménez, apuntó que "con esta decisión nos ponemos a la altura de países como Alemania", y que el proceso "va a ser un ejemplo para Chile y para el mundo".
Ante críticas de agrupaciones ambientalistas de que podría sacarse este tipo de fuente en 2030, indicó que "es muy apresurado pensar que se puede tener lista en 10 años" la descarbonización.
También se refirió a los cortes de electricidad del último tiempo: "Ni el agua ni el viento son excusas para que haya cortes de luz", aseveró.
Y finalmente, Jiménez aludió a la polémica por los cobros de los medidores inteligentes. "A partir de junio ya no estaría incorporado en la tarifa" el cargo, y espera que "ojalá en julio poder hacer la devolución de lo ya cobrado".