El presidente Sebastián Piñera es uno de los principales impulsores de Prosur, que este viernes será presentado como una contraparte a Unasur, liderada en su momento por el venezolano Hugo Chávez y el brasileño Lula da Silva.
“En Unasur lo que hubo fue un choque de distintas posturas ideológicas”, expuso Paz Milet, profesora del instituto de estudios internacionales de la U de Chile.
Sobre el proyecto de nuevo bloque, sostuvo que “no conocemos bien cuál es el compromiso detrás de esto por parte de los presidentes”, aunque “hay una proyección mayor hacia la derecha”.
Los 6 mandatarios que vienen a la reunión, “representan un trance de lo que se ha dado en el último tiempo en América Latina. Entonces, desde esa perspectiva, tienen legitimidad”, que va en paralelo a un “declive de todo el sector bolivariano y la izquierda”.
“Hay una dupla Piñera-Duque (presidente de Colombia) y que buscan tener un liderazgo a nivel regional, y sobre todo como contrapeso a lo que ocurre en Venezuela”, apuntó.
Respecto de la presencia del brasileño Jair Bolsonaro, indicó que “es la visita de un presidente democráticamente elegido”, por tanto, “no estoy de acuerdo con que se hayan restado” los presidentes de la cámara de diputados, Iván Flores, y del senado, Jaime Quintana.
“El tema que uno no comulgue con su idea (de Bolsonaro), no condiciona que uno no pueda asistir. Porque la esencia democrática es aceptar ideas distintas”, esgrimió. “Hay que separar lo que significa el discrepar personalmente con su idea, que lo que significa él como autoridad y uno también como autoridad de un país”, concluyó la analista.