David Benioff y Dan Weiss, creadores de Game of Thrones, revelaron que Ser Pounce, el gato de Tommen fue asesinado en la serie.
"Cersei odiaba el nombre de 'Ser Pounce' tanto que no podía permitirle sobrevivir. Por lo que ella ideó la ejecución más diabólica. La muerte de Ser Pounce fue tan horrible que no pudimos emitirla en televisión", explicaron a Entertainment Weekly.
Además, aseveraron que “no era nada divertido trabajar con dicho animal, los perros sí suelen hacer lo que les pides si están bien entrenados, pero en el caso de los gatos es imposible".