A Paula Díaz se le detectó en 2013 una extraña condición médica que los doctores no pudieron diagnosticar. Como consecuencia, sufría movimientos involuntarios, pérdidas de conciencia, parálisis en sus extremidades y, sobre todo, dolores insoportables.
Y si bien les pidió la eutanasia tanto a Michelle Bachelet como a Sebastián Piñera, finalmente falleció a los 20 años el domingo 20 de enero.
Este caso reabrió la discusión sobre este procedimiento, con un proyecto de ley que actualmente se discute en el congreso.
María José Errázuriz, especialista en cuidados paliativos del Hospital Calvo Mackenna, hizo notar que "hay que hacer diferencia entre eutanasia, suicidio asistido" y cuidados paliativos. De hecho, sostuvo que "si se mejoraran los cuidados paliativos (…) habría menos gente que solicitaría eutanasia".
En este sentido, expuso que "desesperanza y ganas de morir que te manifiestan los pacientes, muchas veces vienen del dolor" tanto físico como psicológico.
También juega en contra el permanecer en ambientes como hospitales. "Un paciente debería estar en su casa con todo lo necesario para manejar su sintomatología, de cualquier tipo. Pero ahí estamos fallando", aseveró Errázuriz.
Sin embargo, "falta mucho recurso" como para pensar seriamente en esta alternativa.
Realidad en hospitales
El presidente Sebastián Piñera declaró que “nosotros sí creemos en el buen morir, en facilitar la muerte digna (…) tener a esas personas conectadas a aparatos sobreviviendo en condiciones inhumanas en forma totalmente artificial no me parece razonable”. Estas palabras fueron valoradas por María José Errázuriz, quien las consideró como "un paso grande", sobre todo por lo que ocurre en centros médicos.
"Me ha tocado (…) varias veces que me lo han solicitado (la eutanasia) los pacientes". Y en caso de niños, "te dicen que quieren descansar", recordó la especialista.
Respecto del procedimiento, "hay que poner ciertos puntos, no puede ser como llegar y pedirla", lo que puede traer algunas distorsiones.
Sobre su rol en cuidados paliativos, aseguró que hay algunos familiares, en especial los que no pertenecen al círculo íntimo de un enfermo, que "creen que es eutanasia. Me han amenazado". Así las cosas, estima que se hace urgente educar.
La religión es otro tema que "pesa harto", mas "te puede ayudar también si explicas bien los conceptos. Pero sí es un punto pesado" a la hora de definir qué hacer con un paciente.
"Somos muy pocos los profesionales formados en cuidados paliativos", expuso Errázuriz, por lo que se requiere de más profesionales en esta área.
Y ya en términos de sistema de salud, el cuidado paliativo es "cubierto por GES sólo para cáncer", por lo que "estamos luchando para que cubra todas las enfermedades degenerativas", concluyó.