El sábado comenzaron a operar los primeros 100 buses eléctricos en el Transantiago, medida que da el vamos a la electromovilidad de nuestro país.
Si bien para el consultor internacional en materia de infraestructura, transportes y desarrollo, Felipe Ulloa, la presencia de estos vehículos es un "hito es muy importante", no es suficiente como para paliar los problemas del sistema capitalino.
A su juicio, se requiere de "certeza de tiempos de llegada y de desplazamiento" de las micros, "independiente del si el bus es eléctrico o no".
En términos más simples, expuso que "Chile hoy día está en una situación de congestión de infraestructura", ya que la condición de calles y corredores “no da abasto con la demanda de transporte".
Ulloa también ahondó en las pérdidas del Transantiago, que en los primeros 9 meses de 2018 aumentó un 9,3% en comparación al año anterior, y que ascienden a los $410 mil millones. Estima que con el tiempo "deberíamos ir reduciendo las pérdidas”, no obstante, admite que es “una tarea titánica".