Hace unos días, entró en vigencia la nueva ley que sanciona a quienes ensucien las playas, ríos, lagos, reservas nacionales, monumentos naturales o áreas de conservación en el país.
Básicamente, se cataloga a estas acciones como una falta, con multas que van entre los $48.160 y $192.640.
El plástico es probablemente el elemento más abundante. De hecho, "desde el 2002 a 2013, la producción de plástico ha crecido un 50%", dijo Mario Herrera, abogado y biólogo marino de la Universidad de Valparaíso. Incluso, algunos plantean que “alcanzaría a un 900% en 2020”.
Y como estos desechos se van partiendo en trozos muy pequeños, "hay cierto tipo de partículas que uno no las ve" en la contaminación en playas, expuso el académico. De este modo, el plástico "finalmente pasa a nuestra cadena alimenticia".
Cabe agregar que hay otros elementos presentes y que son bastante tóxicos, como los “restos de baterías o las pilas, que muchas veces son mucho más contaminantes" que otro tipo de basura, advirtió Herrera.