Los creadores de Stranger Things revelaron que originalmente tenían la intención de matar a algunos personajes importantes al final de la primera temporada, según consignó NME.
En un nuevo libro llamado Stranger Things: Worlds Turned Upside Down, los hermanos Duffer compartieron sus planes originales para el exitoso show de Netflix, incluidos algunos que habrían cambiado completamente las siguientes temporadas.
Eleven, interpretada por Millie Bobby Brown, era uno de los personajes principales que no estaba destinado a sobrevivir. "Eleven iba a sacrificarse para salvar el día", dijo Ross Duffer. "Ese fue siempre el plan”.
"Pero una vez que nos dimos cuenta de que el programa iba a durar más de una temporada, necesitábamos dejarlo más en el aire, porque en el fondo sabíamos que el programa realmente no funcionaría sin ella. Si iba a haber más Stranger Things, Eleven tenía que regresar ", explicaron.
El personaje de Joe Keery, Steve Harrington, también iba a morir en la primera temporada. "Este personaje de Steve se suponía que solo era un imbécil", señalaron los hermanos Duffer, y agregaron que fue el actor el que cambió el destino del, ahora, querido personaje.
Los creadores también revelaron que, aunque el personaje Bob Newby siempre tuvo la intención de morir, estaba destinado a ser asesinado mucho antes en la serie. "Sean Astin demostró ser tan agradable, que la muerte de Bob fue empujada del episodio cuatro al episodio ocho porque queríamos mantenerlo vivo", argumentaron.
"Fue importante para nosotros y también para Sean que le diéramos una muerte más heroica. Queríamos que lograra algo significativo", concluyeron los hermanos Duffer.
El mes pasado se publicó un críptico primer teaser del nuevo ciclo de Stranger Things, cuya nueva temporada se estrenará a mediados de 2019.