Jair Bolsonaro logró el triunfo en los comicios con el 46% en Brasil, seguido del representante del Partido de los Trabajadores y delfín político de Lula da Silva, Fernando Haddad, quien obtuvo un 29%.
“De alguna manera, Bolsonaro ha captado toda la adhesión de las personas que estaban en contra de los partidos políticos tradicionales y de los escándalos de corrupción”, explicó la analista de la Universidad de Chile. Por tanto, parecieran no importar tanto las palabras del eventual futuro mandatario sobre los gays, las mujeres o la dictadura en el país carioca.
“No es que ahora coyunturalmente para las elecciones haya generado un discurso. Él lo tiene a través de toda su carrera política”, detalló la especialista.
Sobre su contendor, Fernando Haddad, apuntó que "no tiene la proyección nacional como la que tenía Lula da Silva". Y la posibilidad de revertir el escenario aglutinando a los otros 11 candidatos a la presidencia, posiblemente sea infructuoso, ya que "generaron muy poca votación".
En paralelo, se desarrollaron las elecciones senatoriales donde la exmandataria, Dilma Rousseff, obtuvo una escuálida votación quedando en cuarto lugar en su zona. Ello "grafica que es una persona que no tiene mayor proyección en una carrera política", concluyó Paz Milet.