Aguas Andinas fue reconocida por la ONU por su trabajo en biofactorías, que esencialmente convierten residuos en energía, electricidad y gas.
La secretaría de Cambio Climático destacó que la empresa "está transformando las tres plantas de tratamiento de aguas residuales de Santiago en 'biofábricas' que convertirán las aguas residuales y los lodos de alcantarillado, un subproducto del tratamiento de las aguas residuales, en energía limpia".
En este sentido, Pickering resaltó que "si hay una estadística donde Chile está en el primer lugar es en el tratamiento de aguas servidas domiciliarias, donde estamos junto con los países más desarrollados del mundo".
Por tanto, "es el país el que ha hecho el esfuerzo" por trabajo en biofactorías, esgrimió el presidente de Aguas Andinas.
Abordó además los desafíos venideros: "Estamos pensando que toda nuestra flota de vehículos se alimente" con gas "producido en nuestras plantas". ¿El objetivo en el corto y mediano plazo? "Pasar a ser una empresa de servicios ambientales".
"Estamos planteándonos repotabilizar a futuro las aguas servidas", expuso.
En paralelo, Pickering también se refirió a las dificultades que acarrean las lluvias estivales: "Verano es mucho más complejo que el invierno" debido a precipitaciones cálidas que pueden enturbiar el agua. No obstante, gracias a diversas obras, ya hay autonomía de 11 horas.
Sobre su pasado en política como exsubsecretario de obras públicas y de interior, reflexionó que “eso fue hace 18 años. Es como otra vida”.
“Después de que me salí del gobierno decidí emprender en el camino privado completamente. Con los 2 pies en el mundo privado, no con un pie en el mundo privado y otro en el mundo público”, resumió.