Oficiales de la Policía Nacional de Paraguay descubieron que al menos 42 fusiles de asalto fueron sustraídos de su arsenal y reemplazados por armas de juguete, informó ABC Color.
La investigación había sido ordenada después de que los fusiles comenzaran a aparecer desde hace un año en el mercado negro, donde alcanzan un valor de hasta $10.000 dólares
Durante una inspección, la policía descubrió que fusiles de gran calibre FN FAL habían sido sustituidos por armas de madera y plástico.
Los fusiles reales, aunque habían sido depositados en un almacén de la ciudad de Capiatá por estar obsoletos, aún funcionaban.