La académica UC e investigadora Instituto Milenio Inmunología e Inmunoterapia se refirió a la diferencia entre el actual brote, que ha sido detectado en 14 personas, y el que golpeó a nuestro país en los ’90.
El de esa década “es capaz de producir una toxina, un componente que produce enfermedades muy severas”. Sin embargo, la cepa o tipo de bacteria actual “que está produciendo el cólera en Chile, no produce esta toxina. Por lo tanto, es menos severo”.
Sin embargo, es capaz de “generar una enfermedad una diarrea acuosa, que pareciera como agua de arroz”.
¿Las consecuencias? “Una gran deshidratación y también puede producir vómitos”, explicó la especialista.
Respecto de las formas de contagio, Bueno fue concisa: “Si consumimos alimentos que están contaminados con deposiciones, nos vamos a enfermar”.
Para prevenir el cólera, es importante el constante lavado de manos, además de remojar frutas y verduras con algunas gotas de cloro por unos minutos.
Finalmente, apuntó que “es mejor evitar” comer en la calle para evitar afecciones.